Consejos
Mecánica del juego
El tetris es muy sencillo. Está compuesto por un rectángulo, donde desde la parte superior de éste caen figuras de diferentes formas, que debes rotar y desplazar, colocándolas en la parte inferior, con el objetivo de completar una línea sin huecos.
Cuando la línea está completa, desaparece y hace que todas las piezas que se encuentran encima desciendan. Si dejas huecos en las líneas, las piezas se amontonan. Debes evitar llegar al tope, ya que en ese caso se termina el juego.
Mientras más líneas completas, más puntos ganas. La dificultad del juego es progresiva, ya que las piezas comienzan a caer con más rapidez a medida que subes de nivel. Se cambia de nivel cada vez que borrar una cierta cantidad de líneas.
Estrategia, capacidad de ordenamiento y rapidez mental son los atributos más importantes para convertirte en un buen jugador de tetris.
Estrategia ganadora
Existe un método para jugar tetris y no perder nunca (en teoría), si eres lo suficientemente rápido con los dedos y colocas las piezas en el orden en que muestran en esta animación:
Tienes que dividir la pantalla en dos, y de cada lado colocar las piezas de igual forma que la figura de abajo, dejando la parte del medio como comodín.
Efecto tetris
Si te has vuelto adicto al tetris, es bueno que sepas dos cosas. En primer lugar, la práctica sostenida de este juego puede producir efectos beneficiosos en tu cerebro. Según un estudio de los doctores Crane y Haier, de la Universidad de California, jugar al tetris de forma prolongada puede potenciar la eficiencia cerebral.
En segundo lugar, si abusas del juego puedes comenzar a padecer el llamado efecto tetris. Inconscientemente, tu cerebro sigue intentando combinar las piezas e imagina los distintos movimientos del puzle aunque estés durmiendo o realizando otra actividad.